Las vacaciones están a la vuelta de la esquina. Enseguida te ves disfrutando en las arenas blancas de Tailandia; descubriendo la cultura y la tradiciones locales de lugares tan lejanos como la India; o atravesando los Estados Unidos sentados al volante de un Mustand por la ruta 66. Imaginas todas estas aventuras y otras muchas hasta que todas estas imágenes desaparecen tan rápido con llegaron.
Siempre se te ocurre alguna buena razón para no moverte de casa, una excusa estupenda para no salir de tu zona de confort diciéndote a ti mismo que no es el momento más adecuado para irte de viaje.
Tienes un montón de facturas por pagar, no sabes con quién ir, te da miedo lo flojo que andas en inglés y crees que no te las sabrás arreglar sin dominar el idioma; no has ahorrado lo suficiente; no sabes muy bien dónde ir…
Hasta que un buen día te des cuenta que quizá ya sea de verdad demasiado tarde. Entonces te tirarás de los pelos y te lamentarás por no haber sabido lanzarte a la aventura sin pensártelo demasiado.
¿Por qué nunca es el momento adecuado para poder viajar?
Desde aquí sólo podemos deciros que dejéis de esperar y de buscar excusas porque nunca será el momento más adecuado para viajar. No planifiquéis demasiado. Haced una mochila con lo imprescindible, coged el pasaporte y un poco de dinero y lanzaros. Seguro que conocéis a nuevos compañeros de ruta que os ayudarán a disfrutar de las cosas buenas que tiene la vida, y que aprenderéis más inglés que en cualquier curso que hagáis.
Recordad que podéis hacernos llegar vuestras opiniones para que sepamos más de vosotros y comentarlo en este enlace a Diario del Viajero Respuestas.
La pregunta de la semana pasada
La semana pasada os preguntábamos ¿Cuál ha sido tu viaje más largo en coche? La pregunta de la semana. Éstas han sido las respuestas más valoradas:
Unbilletedeida comentó que se pasó tres meses recorriendo Australia en una furgoneta, y otros tres en Nueva Zelanda de la misma forma, por los que perdió la cuenta de los kilómetros recorridos.
Epic-dave nos contó que la distancia más larga que había recorrido en coche había sido desde Los Angeles al Gran Cañón, y desde allí a Yellowstone, Las Vegas, San Francisco para acabar de nuevo en Los Angeles.
bmint aseguró que su marido y ella habían recorrido 24.500 km durante dos meses desde Colombia a la Patagonia Argentina pasando por Ecuador, Perú, Chile y Argentina.
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