Plan para toda la familia: ganaderos por un día en una casa rural en Asturias
Una de las actividades más divertidas para compartir en familia es la de pasar unos días en una casa rural. Pero todo es mejorable y el pasado fin de semana he podido experimentar en carnes propias un plan ideal para toda la familia, el de ser ganaderos por un día en una casa rural en Asturias.
Dentro del concepto de turismo rural hay muchas opciones, desde los que simplemente quieren desconectar de la rutina, la gran ciudad, la cobertura de móvil y Wi-Fi etc a los que quieren hacer un turismo activo, participando en distintas actividades, cambiando de vida por unos días. Hace unos meses os hablaba de ser apicultor por un día y hoy os cuento las posibilidades de ser ganaderos por un día, en un entorno privilegiado en el Principado de Asturias.
En las casas rurales de las que os hablo, hay muchas opciones para pasarlo bien. Desde ir en grupo de amigos y organizar una fiesta, a celebrar una reunión familiar o pasar unos días o un fin de semana en los prados integrándose en la naturaleza. Para disfrutarlo, el agroturismo es una posibilidad excelente, idónea para descansar de la rutina de los trabajos de oficina de las grandes ciudades.
Entre Gijón y Avilés, a la altura de Cabo Peñas o Luanco pero entrando hacia el interior del Principado, hay varios establecimientos como el que yo conocí, -Casa Jesusa-, que ofrece además de las comodidades de una casa rural de calidad, la posibilidad de jugar a ser ganaderos por un día. Muy cerca, en Prendes, tenéis además Casa Gerardo, el afamado restaurante de Pedro y Marcos Morán en el que podéis comer sus famosos platos emblemáticos, la fabada y el arroz con leche.
Si vais con niños, tenéis garantizado que disfrutarán enormemente con este plan, que haréis en medio de una zona tranquila de la parte occidental de Asturias, ya que estas casas están situadas en Carreño, en la zona de El Pedregal, en el concejo de Logrezana, del Principado.
Josefina, -la mujer que regenta Casa Jesusa- se encarga de montar actividades entretenidas, tanto para los niños, como para los adultos y con ella todo se puede hablar para organizar un plan estupendo. Ahí la tenéis escanciando una sidra para uno de los grupos.
Los más pequeños disfrutarán jugando con los animales, conejos, gallinas, terneros y hasta podrán hacer amistad con Pedrito, una cabra que parece creerse una mascota, de dócil que resulta comiendo de nuestras manos.
El entorno ayuda y el ambiente casero y natural acompaña en los propósitos de desconectar por unos días. Un hórreo protegido con cristales para evitar las corrientes puede ser el centro de operaciones para juegos y talleres y las instalaciones de los distintos alojamientos, permiten un descanso con garantía de calidad.
Como Josefina es una de las ganaderas que provee de leche a Central Lechera Asturiana conoce muy bien a los animales hasta el punto que todas sus vacas tienen nombre, y parecen entenderse con ella a la perfección.
Junto con sus compañeros de trabajo, ella las cuida, las limpia, las alimenta y las ordeña, -con la maquinaria específica- y hasta sale a pasear con ellas por las tardes, cuando termina su jornada de trabajo...
Todo está muy limpio, y hasta los más urbanitas disfrutan de ese entorno con castaños, robles, acebos, laureles y pinos, relajándose en la naturaleza de la forma más agradable posible. Tanto si buscas esa escapada ganadera como si simplemente quieres desconectar, el plan es perfecto.
En la actividad de ganaderos por un día, los que estén interesados pueden conocer más de la vida de los que ejercen esta profesión, aprender qué comen los animales, ver cómo se extrae la leche y hacerlo personalmente, incluso de forma manual. Ordeñar a mano es una sensación inolvidable que resulta emocionante para jóvenes y adultos.
También ocurre lo mismo al dar el biberón a los terneros o al cuidar de las crías de conejos, pollos y otros animales de los que se crían allí mismo. Y qué deciros de la huerta donde las calabazas, pimientos, fresas y otros cultivos nos recuerdan de dónde vienen nuestros alimentos.
La experiencia de pasar unos días en una casa rural es perfecta y todos lo hemos hecho alguna vez, pero si a ello le podemos sumar las sensaciones del agroturismo que nos permite ser ganaderos por un día y nos ayudan a conocer más la vida del campo y la felicidad de una vida más natural, todavía es mejor.
Os dejo con las palabras que nos dijo Josefina cuando nos marchábamos después de visitar su casa y haber pasado unas horas con ella viendo todo su trabajo y habiendo ordeñado a mano un buen rato. Se refería a sus vacas, obviamente:
"Ahora cuando os vayáis, voy a arreglar a mis chicas y me las llevo de paseo al prado".
Más info | Web Casa Jesusa Fotos | Pakus
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