Muchos sabemos que el castillo de Neuschwanstein, situado en el estado federado de Baviera cerca de Füssen, Alemania, fue elegido por Walt Disney como modelo para el diseño del castillo de la Bella Durmiente de Disneyland. Todo un icono de los cuentos de hadas.
Sin embargo, el cuento original de la Bella Durmiente escrito por Charles Perrault tuvo otro castillo como fuente de inspiración y está en Francia.
Castillo francés
En el corazón del bosque de Chinon a orillas del río Indre, en la comuna de Rigny-Ussé, se encuentra el castillo de Château d’Ussé, construido en el siglo XV. Charles Perrault fue uno de sus huéspedes, y quedó tan impresionado por su arquitectura renacentista que, durante esos días allí alojado, concibió la historia de La Bella Durmiente.
El castillo pertenece ahora a la familia Blacas d’Aulps y, para contentar a los turistas, varias estancias han sido decoradas para representar algunas de las escenas principales de La Bella Durmiente.
El castillo, además, forma parte del conjunto de castillos del Loira que fueron declarados Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 2000.