Se han montado cinco toboganes tubulares en los que los visitantes pueden deslizarse alegremente y gratis. El más alto tiene una altura de más de 50 metros y la bajada se produce a unos 48 km por hora.
Según el artista, que ve el arte de una forma alternativa, los toboganes no sólo son una alternativa al ascensor sino que ayudan a liberar el estrés y combatir la depresión.
En la web del museo se pueden ver los vídeos de la construcción de los túneles con tomas día a día durante cuatro semanas y los deslizamientos desde cada uno de los cuatro niveles. Son muy divertidos.
Si vas a Londres no puedes perderte un "desliz".
Vía | The Lobby Más información | Tate Modern En Diario del Viajero | Así será la Tate Modern de Londres