La Garganta del Infierno y las piscinas naturales del entorno del Valle del Jerte
El Valle del Jerte en Cáceres es un destino turístico incomparable, en especial al comienzo de la primavera durante la floración del cerezo y posteriormente en los meses de mayo y junio con la Cerecera, cuando los cerezos cargados de ciruelas y picotas o, cuando llega el otoño, con las fiestas de las castañas y la Otoñada.
En los meses de verano, el entorno es muy propicio y agradable para los que disfrutan veraneando en la montaña, con buenas rutas de senderismo, cascadas y otros atractivos. Hoy os hablaré de la Garganta del infierno y las piscinas naturales del entorno del Valle del Jerte.
La Garganta del infierno
Es una de las zonas más conocidas en el recorrido por el Valle. Es habitual comenzar con la ruta de la Garganta de las Nogaledas, en Cáceres. Los aficionados al senderismo, encuentran en el Valle del Jerte hasta 19 rutas señalizadas que marcan su recorrido entre las laderas con cerezos y las agrestes gargantas del Valle.
La más popular es la Ruta de las Nogaledas, que sale del pueblo de Navaconcejo, y, tras cruzar el puente de piedra sobre el río Jerte, se dirige hasta la desembocadura de la garganta por un camino sencillo. Se trata de una ruta de senderismo circular, de dificultad baja, con una extensión de poco más de cuatro kilómetros, y con una duración estimada de hora y media si no hay dificultades.
Para ir hacia la Garganta del Infierno, debes contactar con la Oficina de Turismo de Extremadura o con Turismo del Valle del Jerte, para que te indiquen con qué empresas puedes acercarte con vehículos 4x4 ya que está fuera del tráfico para vehículos ordinarios.
Después es una cómoda ruta de menos de siete kilómetros de extensión, que nos llevarán, unas dos horas. Salimos del Centro de Interpretación de la Garganta de los Infiernos. Desde ahí continuamos en un leve ascenso, por una pista forestal. Tras la caminata, comienza el descenso que nos lleva hasta los pilones, marmitas o piscinas naturales del Valle.
Durante el recorrido, veremos cascadas, y vegetación incomparable, ya que hay castaños, encinas y, obviamente, cerezos. En las riberas de las cascadas de agua encontraremos sauces, alisos y fresnos.
Los pilones, las piscinas naturales
Perfectamente señalizada, la Ruta circular Garganta de los Infiernos, nos lleva a la zona de los Pilones, las piscinas naturales que forman caprichosos vasos de agua con bastante corriente, muy agradable en verano, siempre que tomemos las precauciones lógicas.
No hay demasiada profundidad, por lo que en caso de necesidad podemos caminar o ponernos de pie. También podemos ir deslizándonos como si estuviéramos en un gran tobogán, sorteando algunos obstáculos y disfrutando de las corrientes que se retuercen formando las marmitas en cada recoveco del camino.
Teniendo la precaución natural, es un buen lugar para darse un baño y refrescarse durante el verano, donde encontraremos aguas refrescantes y según el momento, más o menos caudal que formará una mayor o menor corriente.