Desde hace algunos años he descubierto las ventajas que supone llevarte un equipaje bien hecho a cualquier viaje. Antes los "por si acasos" dominaban mi voluntad a la hora de hacer la maleta, pero eso quedó atrás: ahora viajo ligera y solo llevo equipaje de mano.
Aunque al principio las dimensiones que imponen las aerolíneas para el equipaje de mano gratuito te condicionan bastante, (a pesar de las multas impuestas recientemente), lo cierto es que es fácil coger el truco y ya no hay vuelta atrás. Te despides de facturar y de esperar por tu maleta en la cinta al aterrizar.
En estos años he depurado bastante la técnica y me he quedado con tres claves para lograr un equipaje completo para una semana.
1. Elegir prendas versátiles y ligeras
Para hacer un buen equipaje de mano, es fundamental invertir algo de tiempo en seleccionar las prendas que te vas a llevar, comprobando que las puedes combinar fácilmente y que se adaptan a las actividades que vas a realizar.
Una camiseta blanca, un vaquero, una camisa lisa, una americana (un par de vestidos en nuestro caso), y un calzado que sea versátil, es el "fondo de armario" que debes llevar contigo a donde vayas. Añadiendo dos partes de arriba un poco más especiales, ropa interior, pijama y una pequeña bolsa de aseo (con muestras y minitallas), tienes asegurada una semana de outfits que te caben perfectamente en una mochila.
2. Utilizar bolsas de compresión
No hay una forma más efectiva para optimizar el espacio del equipaje de mano que utilizar bolsas de compresión. De esta forma aseguras que toda la ropa ocupará el espacio mínimo posible y además facilita organizar encontrar lo que necesitas sin desordenar toda la maleta. Es una inversión que merece muchísimo la pena hacer.
Eso sí, cualquiera que sea la opción que elijas, asegúrate de deshacer el equipaje en cuanto llegues al destino y cuélgala en perchas.
Compression Packing Cubes Ultraligera, 6 piezas Organizador Maleta Compresion para de Viaje, Expansible Organizadores de Viaje
3. Utilizar la técnica del enrollado
En caso de no tener bolsas de compresión, en vez de doblar la ropa, enróllala cuidadosamente. Posteriormente coloca los artículos más voluminosos como vaqueros o suéteres en el fondo y enrolla camisetas, blusas y ropa interior para colocarlas en los espacios que queden.
Además de disminuir el volumen que opcupa, esta se arruga menos y te evitarás la necesidad de utilizar la plancha allí donde vayas.
Imagen de freepik