'Conductor, cada ciclista una cámara' o la razón de que un ciclista sea tan inconsciente como un conductor (I)

'Conductor, cada ciclista una cámara' o la razón de que un ciclista sea tan inconsciente como un conductor (I)
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Vamos a decirlo desde el principio: circular en bicicleta está de moda. No sólo está de moda circular en bicicleta, sino que está de moda vindicar la bicicleta como medio de transporte. Incluso está de moda defender todas los rasgos asociados al hecho de ser ciclista y moverse de esta guisa por el mundo, como el sustrato ecológico o la sensación de libertad. Sin embargo, mucha gente olvida un punto importante: entre los ciclistas hay la misma proporción de necios e inconscientes que entre los conductores de vehículos a motor.

Esta advertencia, tal vez un poco obvia para algunos, viene a cuento de la campaña 'Conductor, cada ciclista una cámara. Respeta los 1,5 metros'. La idea, en esencia, es que los ciclistas transporten una cámara que, a modo de ojo de Gran Hermano, registren todas las tropelías que vengan desde los conductores a fin de, eventualmente, denunciarles. Sobre todo los casos en que los vehículos adelantan a las bicicletas en una carretera sin dejar, al menos, 1,5 metros de distancia. No en vano, esta clase de adelantamientos ocasiona la mayoría de accidentes.

Hasta aquí todo parece razonable. Aparentemente. Sin embargo, hay algo que no me cuadra. Yo adoro el cicloturismo, como ya os expliqué en una ocasión, he recorrido países enteros en bicicleta, como Suiza (lo que me ha llevado incluso a escribir un libro sobre tal hazaña, donde también hago apología de la bicicleta como medio de transporte idóneo para conocer mundo).

Esta experiencia y pasión cicloturística me permiten hacer un par de consideraciones: la primera, que no soy el enemigo, el primitivo y desalmado conductor de vehículos a motor que llena el mundo de polución y ruido; la segunda, que he tenido la oportunidad de conocer a muchos ciclistas y lidiar con ellos de tú a tú.

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Dicho lo cual, me he encontrado con la misma cantidad de necios e inconscientes tanto al volante (sí, también conduzco y he recorrido varios países y continentes en coche) como al manillar. Continuamente soy testigo de un gran número de imprudencias tanto al volante como al manillar. Bien, no dispongo de una estadística, pero eso no es lo relevante: lo que importa es que probablemente hay un número significativo de ciclistas que cometen infracciones.

Evidentemente, el tipo de imprudencias de los ciclistas no son en modo alguno de la misma naturaleza que las de un conductor de coche (el que acostumbra a salir mal parado es el propio ciclista... aunque, según se mire, también el conductor que atropella a un ciclista puede salir mal parado de infinitas formas, por ejemplo psicológicas). En resumidas cuentas, que me parecería justo, dadas las circunstancias, que los vehículos a motor también dispusieran de cámaras y potentes campañas mediáticas detrás para registrar y fiscalizar todas las imprudencias de los ciclistas.

Naturalmente, antes habría que obligar a los ciclistas a que se identificaran con una matrícula y pagaran impuesto de circulación y un seguro. No solo a efectos de identificación, sino también para disfrutar, como lo hacen, de las distintas vías, y a fin de responder ante un posible siniestro.

Con todo, aún hay mucho que matizar acerca de este tema. Algo que haré con más extensión y aportando algunos datos en la segunda entrega de este artículo.

Fotos | Wikipedia En Diario del viajero | Diez razones para hacer cicloturismo o por qué viajar como las mariposas es la mejor forma de viajar | Cicloturismo: rutas y eventos especiales para el 2013 en Argentina

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