Cinco imprescindibles de la Sierra de Montánchez y Tamuja
La Sierra extremeña es un paraíso natural. Hoy os queremos hablar de la Sierra de Montánchez y Tamuja, destacando cinco recursos turísticos imprescindibles en una visita corta o escapada de fin de semana, entre los muchísimos que la comarca ofrece a sus visitantes.
La Basílica de Santa Lucía del Trampal, el Castillo de Montánchez, las Pinturas murales en la Ermita del Cristo del Amparo, el Castro prerromano de Villasviejas del Tamuja o el Claustro del convento de los Agustinos Recoletos, se pueden visitar, formando una ruta estupenda para el fin de semana.
La basílica de Santa Lucía del Trampal
La iglesia de Santa Lucía del Trampal es un monumento construido entre el siglo VII y el siglo IX. Está situada en el municipio extremeño de Alcuéscar, en la provincia de Cáceres. Se trata de un templo con características visigodas y mozárabes, con tres capillas rectangulares abiertas a un transepto.
Es la única edificación de época visigoda que se conserva en pie en la mitad sur de la península ibérica. El 5 de octubre de 1983, fue declarada Bien de interés cultural en la categoría de Monumento.
El Castillo de Montánchez
En la localidad del mismo nombre, encontramos el Castillo de Montánchez. Podemos ver el exterior de los muros del Castillo, y disfrutar de sus vistas. Para terminar el día podemos ir a las bodegas de la localidad a probar su jamón ibérico y sus vinos.
Castro prerromano de Villasviejas del Tamuja
En la localidad de Botija, podemos acercarnos a conocer el castro prerromano de Villasviejas del Tamuja, un asentamiento amurallado, en el que aún hoy en día, se puede ver perfectamente como era la distribución de las viviendas.
Pinturas murales de la Ermita del Cristo del Amparo
En el interior de la ermita del Cristo del Amparo en Benquerencia, podemos ver las preciosas pinturas de policromía, tan bellas que se dice que esta ermita es la Capilla Sixtina de la zona. Las pinturas están dedicadas a la pasión del Señor. A los pies de la ermita se encuentra la última cena y el lavatorio de los pies; también la oración en el huerto de los olivos, la flagelación, el beso de Judas y la coronación de espinas.
En el centro de la ermita está Jesús con la cruz a cuestas y el pasaje de la Verónica, y en el ábside la figura de Dios padre y unos angeles que portan signos de la pasión y resurrección. En la bóveda sobresale la aparición del resucitado y un Ecce Homo. Podemos verlas mientras que no haya culto, solicitando una visita o pidiendo al Ayuntamiento que nos abra la puerta cuando la Iglesia no esté abierta.
Claustro del convento de los Agustinos Recoletos
Terminamos con el Claustro del Convento de los Agustinos recoletos, una maravilla del barroco del siglo XVIII perfectamente restaurada, con unos grabados esgrafiados que son muy singulares. Está unido al costado de la Epístola del convento.
El claustro es de planta cuadrada con galerías formadas por cuatro arcos de medio punto. Una verdadera joya del arte de la cantería con un aljibe en el centro de su jardín. El patio va decorado con esgrafiados a base de emblemas religiosos y bandas vegetales.
Imágenes | Wikimedia Commons, Grada.es, Extremadura.com
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