Hay lugares en donde el paisaje parece tener su propio lenguaje. Sin necesidad de explicaciones, las rocas, la forma de la costa o los colores del mar, te dan pistas sobre una historia antigua que sigue visible, como escrita en piedra.
En la costa occidental de Cantabria , muy cerca de Santander, existe un rincón donde esta sensación es especialmente intensa porque ninguna foto que hayas visto...