Bucear en un cenote en México

Bucear en un cenote en México
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Cuando hacemos un viaje a la zona de la Riviera Maya en la Península del Yucatán, una de las actividades más interesantes que se puede realizar es visitar un cenote, un agujero surgido de la filtración de aguas que formaron cavernas que pueden estar a cielo abierto o conservar su techo. La palabra cenote deriva del idioma maya ts'ono'ot y significa caverna con agua. Al margen de lo bellos que son para los visitantes que van a pie o se quieren dar un baño en sus aguas, la experiencia de bucear en un cenote en México es muy interesante.

Hay muchas razones que hace que bucear en un cenote sea distinto a una inmersión normal. Tanto por el entorno cerrado de bucear en aguas confinadas, como por las diferentes sensaciones al estar dentro de una cueva en la que no hay vegetación ni abundancia de fauna, la inmersión será inolvidable.

Existen numerosos cenotes en los que se puede bucear en México, ya que existen más de 24.000 repartidos por la península. El más conocido, uno de los cinco agujeros naturales más bellos de la Tierra es el cenote Ik Kil, situado muy cerca del complejo de ruinas de Chichén Itzá.

El acceso

Normalmente el acceso para llegar a la boca del cenote está pensado para ir caminando como peatón y no tanto para ir cargado con el equipo de buceo, por lo que es trabajoso llegar hasta el lugar donde comienza la inmersión. Además, precisamente por ese motivo, lo habitual cuando se va a bucear en cenotes es llevar dos botellas en la espalda, para evitar tener que subir otra vez para cambiar la carga, con lo que el camino es algo más penoso.

Pensad que con el calor y humedad de la zona, el traje de neopreno --necesario porque las aguas del cenote suelen ser más frescas que las del mar--, el jacket, regulador, los plomos, las dos botellas, las aletas y la máscara, el paseo o bajada hasta el cenote, aunque no sean más de 50 metros de descenso resulta cansado y conviene recuperar un poco el resuello antes de iniciar la inmersión.

La inmersión

aguas limpias de cenote

Como las aguas del cenote son dulces, los plomos o lastre que necesitaremos para hundirnos son menos que en el mar. En mi caso, paso de 6 kg en el mar a 4 en agua dulce, aunque lo mejor es seguir las recomendaciones de los guías que os acompañen en la inmersión, los cuales, por otra parte, llevarán plomos extra por si fueran necesarios.

Tened en cuenta si hacéis una segunda inmersión seguida, --como fue mi caso--, que la segunda vez iréis con una botella vacía en la espalda, que os hará flotar más por lo que para dicha segunda inmersión convendrá llevar un kg extra de plomo.

Tras las comprobaciones iniciales, y disfrutando del entorno antes de bajar, comienza la inmersión para bucear en un cenote en México. Como las referencias son menores que en el azul del mar, en los cenotes donde yo me he sumergido, hay una cuerda que marca el recorrido que hay que seguir y que permite orientarse. No es necesario ir agarrado a la misma ni ir justo al lado, pero sí ayuda a saber hacia donde hay que dirigirse.

La visibilidad es buenísima siempre que llevemos bien limpia la máscara de bucear, aunque el suelo de la cueva o cenote tiene algo de barro o limo que se puede levantar enturbiando las vistas. Tenedlo en cuenta si sois buceadores noveles o si vais en un grupo con algun compañero que aletee mucho. Lo recomendable, mantener una postura horizontal, hacer pequeños movimientos y dejarse llevar por la sensación de ingravidez.

flotar cenote

Esta sensación, una de las razones por las que me gusta bucear, se acrecienta mucho en este entorno, al no haber corrientes ni corales o algas, ni tampoco peces, y siendo calizas las paredes del cenote, uno se siente suspendido en el espacio, como si flotara en la inmensidad de un paisaje blanquecino.

Qué ver buceando en un cenote

Por desgracia, cuando estuve buceando no tenía aún una cámara de fotos que pudiera sumergirse por lo que no tengo fotografías submarinas de esa experiencia. Sin embargo, puedo contaros perfectamente lo que hay para ver y qué fue lo que más me gustó. Lo primero que os digo es que se bucea con foco o linterna, para poder ver en las zonas donde no hay entrada de luz natural, al igual que se hace en las inmersiones nocturnas.

En cuanto a vegetación, al no haber luz natural suficiente que permita la fotosíntesis, no se ven algas ni otros organismos similares. La fauna es muy escasa pero en algunos cenotes se puede ver el pez ciego de Yucatán (Typhliasina pearsei), la damablanca ciega (Ogilbia pearsei), la anguila ciega (Ophisternon infernalis), la anguila de lodo (Ophisternon aenigmaticum), esponjas, bivalvos, camarones y crustáceos despigmentados (como el Speleonectes tulumensis) y plancton, en general ciegos y de colores blanquecinos por la ausencia de luz natural.

inmersion cenote

Los paisajes son increíbles ya que en lugar de corales y esponjas, vemos estalactitas submarinas, columnas y pilares. A veces hay accesos a otras cuevas incluso se puede salir a respirar en determinadas zonas al acceder a cuevas o bóvedas.

Entre otros, os recomiendo bucear en el cenote de los Dos Ojos, en el que la luz natural que entra por las bóvedas abiertas os hará disfrutar de un maravilloso espectáculo. Dos ojos está situado en la Carretera Federal 307 y tiene algunos servicios como baño, aparcamiento y bar.

Para bucear en un cenote en México hay muchas opciones. Otros cenotes recomendables, todos en la zona de Playa del Carmen, son Gran Azul, Chac-mool, Taj-Mahal, Gran Cenote, Carwash, Ponderosa, Angelita, situados en la zona sur de dicha ciudad.

Fotos | Pakus y Dmap en Flickr En Diario del Viajero | ¿Por qué me gusta bucear? En Diario del Viajero | Península de Yucatán: Los hermosos y sagrados cenotes

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