Bolonia es una ciudad para recorrer y saborear con calma, perderse por el centro histórico y por las afueras, pasear bajo sus pórticos infinitos y degustar sus "aperitivi". Y aunque cueste, vamos a seleccionar diez visitas imprescindibles en Bolonia, a las que esperamos que suméis las vuestras.
Veamos esas diez paradas que deberíamos hacer para llevarnos la mejor imagen de la ciudad, aunque tan solo sea una muestra de sus rincones más especiales y de todo el patrimonio que atesora.
La Plaza Mayor es el epicentro de la ciudad, con una animación continua y repleta de rincones emblemáticos que también merecen parada especial. Nos quedamos con la popular fuente de Neptuno, mitológica, erótica y estudiantil.
Seguimos en la Piazza Maggiore, porque adentrándonos en el Palazzo d'Accursio o Palacio Comunal encontramos las Colecciones Municipales de Arte (Collezioni Comunali d'Arte).
Basílica de San Petronio, patrón de Bolonia, en la misma Plaza Mayor. Dicen que no tiene la categoria de catedral por recelos del Vaticano en su momento, pero estamos ante la quinta iglesia más grande del mundo. Domina la Plaza y la ciudad, con 132 metros de largo por 60 de ancho y una altura de 45 metros en su cúpula.
Pero por altura, esta antigua torre defensiva la supera. No podemos dejar Bolonia sin subirnos a la Torre Assinelli, que junto a su hermana pequeña Garisenda vigilaban la ciudad hace siglos. Tras subir los 498 escalones nos esperan las mejores vistas de la ciudad, a casi 100 metros de altura.
El Archiginnasio de Bolonia fue sede de la que se considera la Universidad más antigua del mundo, la universidad de Bolonia. Entre paredes y techos tapizados de escudos llegamos al espectacular Teatro Anatómico, en esta ocasión forrado de maderas nobles. Aquí se formaron muchos galenos ilustres.
En la misma calle encontramos el Museo Cívico Arqueológico de Bolonia, en el Palazzo Galvani, adyacente a la Piazza Maggiore de la ciudad. Es uno de los museos más antiguos de la ciudad. En él podemos hacer un recorrido por la historia de Bolonia desde la prehistoria a la época romana.
La Basílica de Santo Stefano, o cuatro iglesias en una. Es un complejo religioso medieval de gran belleza, lugar con mayor concentración de iglesias en la ciudad: cuatro templos que hoy se pueden visitar en el mismo recorrido.
El Santuario de Nuestra Señora de San Luca se convierte en un mirador estupendo a la ciudad, sobre una colina. para llegar a ella podemos hacerlo a través del Pórtico de San Luca, de 3'78 km de largo, con 666 arcos y 15 capillas que jalonan el ascenso.
De entre los museos gratis en Bolonia nos gustó especialmente el Museo Geológico Giovanni Capellini, el más grande Museo Paleontológico italiano, tanto por sus dimensiones como por el volumen e importancia de la colección. No os lo perdáis de ningún modo si viajáis con niños.
El Parque de la Montagnola nos recibe con unas imponentes escaleras de mármol y fuentes mitológicas. El paseo por su interior se hace muy agradable y refrescante en verano, un buen recorrido antes de recorrer el mercadillo que se sitúa en uno de sus extremos los viernes y sábados.
Seguro que realizando estas visitas imprescindibles en Bolonia os encontráis con otras tantas reseñables, iglesias con pequeños tesoros, restos de la antigua muralla medieval, mercados tradicionales y hasta un pequeño canal que pervive recordándonos Venecia.
Y es que como más se disfruta Bolonia es con las visitas imprescindibles de cada uno, pero qué difícil es poner un límite. Seguro que puedes recomendarnos algún recorrido que te gustó especialmente.
Fotos | Eva Paris
En Diario del viajero | Museos gratis en Bolonia, Subir a la Torre Asinelli de Bolonia: las mejores vistas de la ciudad, Cómo llegar del aeropuerto de Bolonia al centro de la ciudad