Siempre que me preguntan por viajes exóticos mi cabeza se traslada inevitablemente a aquellos paseos por los templos de Angkor en Camboya. Pocos sitios me han impactado en el mundo como este complejo levantado por el Imperio Jemer.
Sólo se ha recuperado una parte de los templos de Angkor a la selva, por lo que hay que hacer un verdadero ejercicio de imaginación para atisbar la grandeza de todo aquello. Lo que se puede visitar es impresionante, así que ¿cómo sería pasear por aquellas avenidas en sus momentos de esplendor?
En la actualidad muchos de los templos siguen en restauración, pero esa mezcla de arte hinduista, budista y la voracidad de la selva camboyana han cocinado un cóctel que dejará boquiabierto al más experimentado de los viajeros. Vamos a dar un paseo por los templos de Angkor más importantes y comprenderéis porqué.
¿Cómo llegar hasta Angkor y cómo desplazarse?
La forma más rápida y cómoda de llegar a Angkor es en avión aterrizando en el aeropuerto internacional de Siem Reap. Hay vuelos desde la capital de Camboya, Vietnam, Malasia, Tailandia o Singapur. No obstante, también hay autobuses y hidrodeslizadores.
Una vez en Siem Reap, la manera de desplazarse por Angkor dependerá del presupuesto del viajero. Se pueden alquilar bicicletas, motos, minibuses, moto-taxis, incluso elefantes. No obstante, debido a las altas temperaturas que se alcanzan en la selva, yo recomiendo que se alquile un coche con aire acondicionado y con guía que puede costar unos 30 dólares.
Los tres imprescindibles de Angkor
Para ver bien los templos de Angkor serían necesarios tres días como mínimo. Sin embargo, mucha gente visita esta zona como complemento o colofón a un viaje por el sudeste asiático, y en muchas ocasiones se tiene que ir al grano. En este sentido, si vais muy pillados de tiempo, hay tres templos que considero imprescindibles.
El más célebre y espectacular de todos es Angkor Wat. Se trata de un complejo enorme al que merece la pena dedicarle muchas horas. Esta ciudad-templo fue erigida en honor del dios hinduista Visnu, aunque actualmente son los monjes budistas los que oran entre sus muros.
El santuario principal está rodeado por dos murallas que guardan sus espectaculares cinco torres con forma de flor de loto. Merece la pena esperar a que se ponga el sol o madrugar mucho para ver como los primeros rayos iluminan sus muros. Es algo mágico.
Otro de los templos más sobrecogedores es Ta Prohm. Donde hoy se encuentran estos vestigios arqueológicos, se hallaban 3.000 aldeas que eran pobladas por unas 80.000 personas. El imperio Jemer fue desapareciendo poco a poco, mientras la naturaleza siguió creciendo a su antojo. Ahora las grandes ceibas comparten espacio con este antiguo monasterio.
Los viajeros tampoco deben dejar de visitar Bayon. Está ubicado justo en el centro del complejo denominado Angkor Thom. Se trata de un lugar muy enigmático, cuya principal característica son sus 54 torres con caras sonrientes mirando hacia los cuatro puntos cardinales.
Como veis, un paseo por los templos de Angkor en Camboya da para muchísimas anécdotas, experiencias y aventuras. Aquellos que busquéis viajes exóticos en la selva camboyana os toparéis con una de las maravillas culturales más sobrecogedoras del mundo.
Fotos | Imágenes de Angor Wat, Bayon y Ta Prohm de Pau
En Diario del Viajero | Los templos de Angkor en peligro, Entradas y horarios para visitar los templos de Angkor